Observando los objetos hand-made, tan bonitos, con esa dulzura y encanto que da el hacer las cosas con cariño, me imagino cómo es la persona que hay detrás de ellos y en qué lugar hace sus creaciones.
.
Aquí traigo unas imágenes de rincones creativos, espacios concebidos para abstraerse de lo humano y deleitarse con lo divino. Sitios donde el portátil y la impresora, comparten espacio con destornilladores, botones, pinceles y máquinas de coser.